En espíritu ya vuelo a Dublín, aunque mi inmanencia desearía volver a gozar de ese paraíso irandés (a 30 kms) llamado Wicklow. ¿Puede llamarse matrimonio católico a la autoridad de un "paterfamilias" que dice: "yo tengo mi casa, mi choche, mi visa, mi misa, y mi Mª Luisa" ? No me tiembla el pulso a la hora de escribir que ese modelo es anticristiano y es de una falsedad incontestable. Más grave aún me parece que, ignorando el Código de Derecho Canónico, se obligue a chicas y chicos jóvenes a someterse a ese modelo, y se les inculque como modelo de família católica.
La primera vez que tomé conciencia de la mujer como víctima en la iglesia, fue la tarde en que tuve que comunicarle a mi novia que debíamos poner fín a nuestro noviazgo, porque iba a comenzar una relación esponsal, absoluta, con el Amor. Lloramos juntos, pero descubrí que ella, y con ella todas las mujeres, era la única víctima real de nuestra ruptura.
Nuestro Papa Francesco ha denunciado ese machismo (ad intra y ad extra) que considera a la mujer un ser de segunda clase. Las “variadas formas de seducción engañosa y prepotencia humillante” que se ejerce hacia las mujeres. “La mujer no es una réplica del hombre, sino que viene creada directamente de Dios”.
“Dios deposita en el hombre y en la mujer una confianza plena, pero
el maligno pone en su corazón la sombra de la sospecha y la
desconfianza, llevándoles a la desobediencia a Dios y a destruir la
armonía entre ellos”. “Su relación empieza a verse asediada por mil formas de seducción engañosa, de humillación e incluso de violencia”. Este es "il lavoro satanico" que resulta más fácil, con esa deformidad del matrimonio católico del que hablaba al principio. Un ejemplo: la relación sexual, no como elección del marido y la esposa; basta que "el superior" lo ordene.
Como en ese WMOF2018 no haya gente con otras ideas, me temo que las mujeres van a ver en la mascota Éirinn, lo que los movimientos participantes piensan de ellas. Por cierto, que el creador sea el autor de la serie americana de TV "Vampirina", ya me daba en la nariz.
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